LA ESPERA
Nadie piensa
como yo;
Nadie habla
como yo;
Nadie respeta
como lo hago yo,
Nadie apoya
como yo;
Nadie agradece
como yo;
Nadie bendice
como lo hago yo;
Nadie es
bondadoso como yo;
Nadie amaría de
la manera que lo haría yo,
No acabo en la
tentación, ni en la lujuria, controlo la furia de mi cuerpo, se lo pecaminoso
que será…
Dos almas que
se pertenecerán, dos cuerpos que se profanarán, ambos sumaran y meditaran,
tripularan y llenaran su amor.
Aunque la
espera sea larga, siempre sabré esperar y mi cuerpo nadie tocara.
Jenny Sandra
Muñoz Livio.
No hay comentarios:
Publicar un comentario