jueves, 12 de febrero de 2015

ATENCION


ATENCION CON LAS PALABRAS BONITAS

Donde solo el inocente puede caer;

Tu mirada se embelesa en la mía, mirada que habla dulcemente, que presente y que evidente.

Me nombras con palabras cálidas  que pienso creer y a la vez no creer;

Tus palabras son escasas, sin cultura, tan carente, tan mísero.

Qué fácil es llamar, amor cuando no lo hay, palabra que se siente flotando en el mar…hartando voy limpiando y sigo rimando, cargando voy.

Una vez más eres mi inspiración, que nada es real;

Me susurras… a ti, si te contestare y llamare…

Se siente las yagas, las heridas de tu interés, ser imperfecto de lo real.

Hablas de música de la cual no te inspiras, ni la vives, me dedicas letras de canciones sin antes analizar el contenido, pero consigo expresar lo entendido.

Hablas de un futuro, por hablar, como se calcinan tus palabras en el andar.

Te nombro, sigo observando a tantos como tú, la actitud y la aptitud… dejas mucho que desear.

Abandonas e huyes de lo evidente… mezclándote en otra relación tan incuestionable y claro.

Lo bueno que nunca me conocisteis, pero yo si te conocí.

Alborotas mis sentidos, los cuales están sumisos en lo vivido; ser arrogante y fatal.

Tienes el privilegio y la astucia de enamorar, vas a triunfar, tu caminar va alumbrar si quieres engañar, aquel se implicara… veras que voy a liquidar.

Bribón que hurga en las redes,

Sacacuartos,  que espera su presa, diciendo no te haré gastar,

Farsante, sabes engañar… manejas bien tus hábiles palabras,

Enemigo de la verdad

Enemigo de la lealtad

Enemigo de lo legal

Amante de la mentira y falsedad.

Espetas, si te hubiera conocido antes… antes de que… impregnado de falacia.

Regodeo que nuestros cuerpos no se conocieron, siempre le pedí a Dios que me alejara del mal, pero no pensé que tú estabas incluido, ahora veo todo con claridad.

Mi vista, alerta está en mi cerebro;

Mis oídos, atentos escuchan las vibraciones de la malicia;

Mi tacto, presente esta, detallo cada aspecto de éste;

Mi olfato, siente el olor nauseabundo de la maldad;

Mi gusto, detectara lo amargo, lo salado, ante lo dulce y lo grato.

Pasaran uno, dos, tres años, pero mi cuerpo esperara y que nadie tocara, ni conocerá.

La espera larga, corta... pero no pasajera.

Aguardo en el tiempo que es mi tesoro, algo fortuito renacerá.

Me amo, me respeto y me valoro, por eso que soy así.

Nunca abra palabras mal dichas si no mal entendidas.

Gracias por alejarlo de mí.
Jenny Sandra Muñoz Livio.

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